El Slalom es un deporte practicado en silla de ruedas cuyo objetivo es superar un número de obstáculos determinados en el menor tiempo posible.

La prueba de Slalom consta de dos recorridos: Uno obligatorio, que es fijo en todas las competiciones y otro libre, variable en cada competición.

La prueba tendrá lugar en un polideportivo cubierto, o un área descubierta si las condiciones climatológicas lo permiten, con unas dimensiones mínimas de 45 x 25 metros.

 

El recorrido se llevará a cabo sobre una superficie dura y lisa, estará claramente delimitado y marcado.